¿Qué ocultamos tras los mitos sobre la alimentación? ¿A qué deberías prestar atención a la hora de alimentarte? La alimentación no siempre es sencilla. Existen muchas creencias erróneas entorno a los alimentos. Muchas veces hemos oído aquello de que los alimentos frescos son más nutritivos, lo cual no siempre es cierto. Encontrar respuestas claras a estas cuestiones puede resultar complicado. Por ello, nos hemos propuesto desmontar los mitos sobre la alimentación.
Los mitos sobre la alimentación. Qué hay de cierto en ellos?
Las grasas
Comenzaremos con la pregunta ¿Es cierto que el consumo de grasas engorda? La primera impresión puede ser que debe engordar si tiene grasa, la realidad es que cuando se come regularmente alimentos altamente nutritivos se acaba comiendo menos porque sacian más y, aunque contienen grasa, es la misma grasa que ayuda a transportar vitaminas y minerales que contienen los alimentos. Lo que sí debemos tener en cuenta es que existen diferentes tipos de grasa, y que es mejor priorizar aquellos que nos aporten grasas de calidad (monoinsaturadas y poliinsaturadas) como el omega 3 y el omega 6.
Pirámide alimenticia
También es importante señalar que la alimentación de una persona debería estar basada en la pirámide alimenticia. Esta pirámide recomienda comer en su base cereales refinados y derivados, lo cual puede no ser lo ideal, una mejor opción pueden ser los cereales integrales. Las frutas, verduras y hortalizas en el segundo lugar y las carnes, huevos y lácteos en tercer lugar y en cantidades pequeñas. Finalmente, los alimentos grano entero, frutos secos y semillas, aceites saludables y azúcares naturales son los alimentos que hay que ingerir con moderación. Todas estas recomendaciones generalistas deben ser cogidas «con pinzas» ya que el contexto de cada persona es único.
En un contexto de sedentarismo debemos primar las verduras y hortalizas como base, acompañadas de alimentos proteicos de calidad (carnes, pescados, huevos, lácteos…) y una aportación segura de carbohidratos complejos y grasas saludables. Esto cambia en un contexto activo, en que se realiza actividad física habitualmente, donde las cantidades de grasas saludables, carbohidratos y proteínas deben aumentar.
Debemos tener en cuenta también que cada persona es única y por lo tanto tendrá unos hábitos alimenticios únicos. Sus necesidades nutritivas pueden ser muy diferentes a las de los demás. Es por esto que hay que tener en cuenta la edad, el sexo, el estado de salud, el nivel de actividad y otros factores para determinar una dieta que sea adecuada para uno mismo.
Otros mitos sobre la alimentación
Además de la información aquí presentada, existen muchos mitos más sobre la alimentación. A continuación te presentamos algunos de los que seguro que has oído hablar.
Alimentos integrales
Por ejemplo, el mito de que los alimentos integrales engordan menos es falso. Una cosa es que sean más saludables, y otra muy distinta es que en si engordan menos. Lo aclaramos rápidamente, los alimentos integrales proporcionan más fibra, lo que ayuda a aumentar la sensación de saciedad. Por otra parte la fibra es beneficiosa para el correcto funcionamiento intestinal y por tanto es más saludable incluir los alimentos integrales en la dieta que los refinados.
Alcohol
También es comúnmente creencia que el alcohol en dosis pequeñas no tiene riesgos. Realmente esta creencia es errónea. El alcohol es negativo para la salud en cualquier dosis, si que es cierto que en pequeñas dosis este efecto será menor, pero la sustancia en si provoca deshidratación, ayuda al desarrollo de inflamación crónica, provoca, también, una desregulación en el metabolismo de las proteínas perjudicando, así, la hipertrofia y las adaptaciones al ejercicio, etc.
Alimentos congelados
Uno de los mitos más difundidos es el de que el consumo de alimentos congelados es menos saludable, cuando en realidad, el pescado y la carne, así como las verduras, si son congelados en condiciones óptimas mantienen su frescura intacta. Y, por tanto, se convierten en una opción económica y cómoda para una buena alimentación.
Alimentos enlatados
En contra de lo que la gran mayoría de personas piensa, muchas veces los alimentos enlatados tienen una cantidad similar de nutrientes que los alimentos frescos. Y son una gran forma de conservar y facilitar el consumo de productos de alta calidad nutricional.
Papel de la alimentación en nuestras vidas
Por último, nos gustaría destacar la realidad de que una buena alimentación está relacionada tanto con la eficiencia académica como laboral y el bienestar social de las personas.
Es por ello que se recomienda una alimentación equilibrada, acompañada de actividad física diaria y un buen descanso, estos son los pilares de la salud si los acompañamos de una buena salud psicológica.
No te confíes y recuerda que los alimentos refinados no forman parte de una alimentación saludable. En su lugar opta por productos integrales que engloban toda la fuerza de los nutrientes, que aportarán energía durante todo el día. Los alimentos ricos en fibra, proteínas, carbohidratos, vitaminas y minerales deben ser los básico de tu dieta, sin olvidar los lípidos, encargados de proporcionar energía.
Es importante mencionar que, aunque muchas personas creen en ciertas afirmaciones erróneas acerca de los alimentos, hay que tener en cuenta que muchas de estas afirmaciones son falsas o están mezcladas con medias verdades. Desde luego, llegar a conclusiones ortodoxas sobre la alimentación no es algo que se pueda hacer de la noche a la mañana. Además, hay que tener en cuenta que una dieta equilibrada no necesariamente significa que hay que comer determinados alimentos, sino que se trata de diversificar para obtener la cantidad correcta de nutrientes.
Cabe destacar que comer de forma saludable es una decisión consciente y debe ser tomada en serio. Por esta razón, deberías tener en cuenta todos los aspectos de la alimentación en tu vida cotidiana. Siempre debemos intentar alimentarnos saludablemente y recordar que es nuestra responsabilidad tomar la decisión correcta a la hora de comer.
Conclusión
En conclusión, podemos decir que el mantener una buena alimentación es un paso importante para una buena salud y una buena calidad de vida. Es importante evaluar críticamente toda la información que escuchamos sobre la nutrición y optar por lo que es más saludable para nosotros mismos. Si sigues las recomendaciones aquí esbozadas, obtendrás grandes beneficios para tu salud.